¿Por qué es importante la capacidad de liderazgo del Gerente en el Sector de la Salud?
La figura del Gerente en el Sistema de Salud posee autoridad formal dada por la confianza que su cargo representa, y el éxito de su gestión recae directamente en la calidad de su desempeño, la toma de decisiones y en las acciones más sólidas de su liderazgo.
En las organizaciones sanitarias, el liderazgo consiste en el proceso de dirigir, organizar, diseñar, optimizar, evaluar las actividades de los miembros de un grupo interdisciplinario e influir en ellos para propiciar la colaboración y la concertación; además de facilitar la comunicación y el trabajo en equipo. La meta del líder es forjar un grupo de acción comprometido con la calidad, dispuesto a lograr la visión y los objetivos de la organización. El poder de un líder radica en la capacidad de influir en los demás, matizando frecuentemente creencias, tradiciones, normas, experiencias y valores de cada organización. El líder debe ser visionario, y según JP Kotter, “el líder visionario establece el futuro, conduce a las personas de acuerdo a esta visión y las inspira para hacerla realidad, a pesar de los obstáculos”.
El liderazgo en el sector salud debe estar orientado a producir los cambios necesarios. Los líderes -dada su brillante actuación y gran energía- son fuente de inspiración para sus seguidores. El líder es el factor clave para hacer la diferencia entre el éxito y el fracaso y lograr la optimización en la calidad de la atención sanitaria.